CASI TODO ESTÁ OCULTO BAJO LA ESPESA BRUMA
Sin el menor atisbo de acritud y con mi más sincero respeto hacia su persona Sr. Alcalde, y por supuesto hacia su corporación; la actitud de ayer día 15 de marzo de encerrarse en el consistorio me suena a excusa o cuando menos un insulto a la inteligencia de todos sus conciudadanos.
Ayer mismo, en el Diario de Cádiz, hice un breve comentario, la verdad es que quinientos caracteres dan para poco más que para una breve presentación, sin embargo lo que estuve leyendo, al margen de cualquier otra consideración política, me parece que debía hacerle reflexionar no sólo sobre esta actitud puntual sino sobre su trayectoria al frente del timón de este pueblo.
Me va a permitir exponer el por qué pienso que su actitud, creo que irreflexiva, me parece un canto de sirena. Por tres razones:
1.- Si usted se presentó como candidato a la alcaldía de Barbate hace cuatro años, sin saber qué es lo que le esperaba, me parece de una irresponsabilidad supina. Sobre este punto huelga cualquier otro comentario.
2.- Si usted aún sabiendo cómo estaba, lo asumió y no pidió responsabilidades al equipo de gobierno saliente, me parece que actuó usted o de manera muy irresponsable (no quiero pensar que lo hizo obedeciendo consignas desde las más inmediatas jerarquías superiores), o con una candidez digna de nuestro Ilustre Hidalgo; pero no, en política los “Cándido” (de Voltaire me refiero) dejaron de existir mucho antes de que naciera éste, dejaron de existir con Maquiavelo, y de su doctrina parece que se han empapado nuestros políticos bastante más que de otras filosofías en la línea ética que el pueblo reclama.
3.- Sr. Alcalde, si es verdad que usted presentó su dimisión en más de una ocasión, me parece que se ha desacreditado. Nadie está donde no quiere y mucho menos donde no le han dejado hacer su trabajo con dignidad. Si en su momento hubiese dado un golpe de autoridad sobre la mesa política en nombre de todos los barbateños, que vimos en usted nuestra tabla de salvación, ahora no estaríamos en esta situación y el pueblo como en el alcalde de Zalamea: “Todos a una” y con usted.
Mire Sr. Alcalde, soy como usted socialista, sé que estamos atravesando una crisis económica a la que Barbate no es ajena; pero de ahí a que no se haya tenido ni un solo gesto de buena voluntad para con este pueblo, desde los gobiernos autonómico o central hay un abismo. Me siento frustrado pero al mismo tiempo esperanzado. Como verá yo sí sigo siendo cándido como no podía ser de otra manera. Esperanzado porque creo que el único partido capaz de sacarnos de esta difícil situación es el Partido Socialista y por eso pienso que aún estamos a tiempo de rectificar y de intentar hacer las cosas, las que sea, con honradez y dignidad.
Sinceramente Sr. Alcalde no me creo juez de nada ni de nadie, entre otras cosas porque creo que no tengo derecho, sin embargo, me asiste la facultad de la crítica constructiva y en el nombre de ella le deseo buena suerte en su nueva singladura. Y por favor no se deje manipular.
Nunca olvido una cara, pero con usted haré un excepción
Groucho Marx
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