Cuento de Navidad para niños sobre la importancia de vivir el momento
Este cuento de Navidad: "El abeto", fue escrito por Hans Christian Andersen y se publicó por primera vez en 1844. Cuenta la historia de un árbol que está tan ansioso por crecer y lograr grandes cosas, que se olvida de vivir la belleza del momento.
Es un relato navideño que podemos leer con nuestros hijos y explicarles que deben valorar lo que tienen, en lugar de soñar con lo que no poseen; que han de disfrutar del momento, en lugar de pensar en lo que ocurrió en el pasado o desear que llegue el futuro. Un cuento navideño para reflexionar sobre la importancia de vivir el momento.
Me he tomado la libertad, y por qué no decirlo también, el atrevimiento de escribir una versión libre (atemporal y posiblemente distópica) de este bonito cuento de Navidad. Una versión libre que sirva de acicate para quienes lo lean de que disfruten del original, y a ser posible con sus hijos, nietos, o seres queridos.
A los puristas no me queda otra que pedirles perdón por la travesura de esta versión y a quienes osen leerlo, gracias.
“Un joven abeto vivía en el bosque, soñando con el día en que sería elegido para ser un árbol de Navidad. A diferencia de sus compañeros, a él no le interesaba crecer alto y fuerte simplemente para hacer sombra. Su ambición era ser el centro de atención, adornado con luces brillantes y guirnaldas relucientes. A menudo, el viento le susurraba historias de los árboles del pueblo, llenos de bolas de colores, oropel y dulces colgantes, y él soñaba con vivir esa vida.
Un día, su deseo se hizo realidad. Fue talado con cuidado y llevado a una casa grande y luminosa. La casa olía a galletas recién horneadas y a risas de niños. El abeto sintió una emoción inmensa al ver cómo las manos delicadas de una familia lo llenaban de belleza. Le pusieron luces LED que cambiaban de color, esferas de cristal brillantes y un muñeco de Papá Noel con una barba de algodón en la punta de la estrella. Los niños lo rodeaban, le tomaban fotos con sus teléfonos inteligentes y lo publicaban en las redes sociales con la etiqueta #ÁrbolPerfecto. El abeto se sentía el más feliz y el más importante del mundo.
Las semanas pasaron en un abrir y cerrar de ojos. El abeto escuchó villancicos, vio cómo se abrían los regalos bajo sus ramas y se sintió amado y admirado. Sin embargo, a medida que los días de fiesta se fueron acabando, la familia empezó a ignorarlo. Sus luces se apagaban y encendían cada vez menos, y las fotos en las redes sociales se llenaron de otras cosas. Las risas de los niños se convirtieron en silencio.
Una mañana, el abeto se encontró en el patio trasero. Ya no había luces ni adornos. Sus ramas estaban secas y sus agujas caían. Se sintió solo y olvidado. Sus antiguos adornos eran ahora cajas llenas de adornos para la próxima Navidad. Mientras esperaba a ser cortado y convertido en leña, vio cómo el sol de la mañana se reflejaba en los cristales de la casa y se lamentó. Comprendió que su belleza había sido pasajera y superficial. Recordó las historias que el viento le contaba de los árboles del bosque, que vivían una vida simple pero llena de significado".
Moraleja.
El cuento El abeto de Navidad de Hans Christian Andersen nos enseña una lección que sigue siendo muy relevante hoy en día. Nos recuerda que la verdadera felicidad no se encuentra en el reconocimiento superficial o en ser el centro de atención, sino en la belleza simple de la vida. La historia del abeto es una llamada de atención para que valoremos lo que tenemos, sin importar su valor material, y para que recordemos que las cosas que realmente importan son los momentos que vivimos, no los objetos que poseemos.
FUENTES CONSULTADAS:
La imágenes han sido generadas por IA (Copilot, Ideogram y Microft Designer)
La composición de la cabecera se ha realizado con Photoshop
El abeto. Cuento infantil - Texto completo. Hans Christian Andersen.
Redacción libre del cuento.
https://ciudadseva.com/texto/el-abeto/
Hasta luego y suerte
Paco Gil Pacheco (@PacoGilBarbate)
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