Entiendo que nunca se es lo suficientemente prudente, yo al menos no lo soy, de ahí este artículo. Soy de los que de vez en cuando vuelvo la vista atrás para recordar, sobre todo, para no olvidar, aquello en lo que jamás deberíamos volver a caer, y me encuentro con que la madre de los imbéciles están siempre preñadas. Es lo que hay y no me produce desasosiego, pero sí cabreo lo confieso.
Hace algún tiempo ya, concretamente el 10 de mayo de 2020, publiqué en este mismo blog un artículo cuyo título era; “¿Y ahora qué? El día después”, el día 1de septiembre de 2020 publiqué otro al que llamé: “De la esperanza a la desilusión. Simplemente un desconfinamiento”. De ninguno de los dos me arrepiento, si acaso y solamente de ser algo pusilánime. Así que los reivindico sin más.
A un chico de 13 años, hijo del Gran Capitán -personaje de la novela “Todo va a mejorar”, de Almudena Grandes - alumno de un colegio privado elitista como correspondía a su condición y cuna de nacimiento, le lanzan, en un debate telemático la siguiente pregunta: -¿Qué nos ha enseñado el coronavirus?, a lo que el chico contesta sin atisbo de duda alguna, -La importancia de la sanidad pública, del estado de bienestar, la necesidad de sostenerlo a toda costa. Una respuesta que recibió el aplauso unánime de todos sus compañeros. Aún así es sorprendente la respuesta y el primer sorprendido por ella fue su padre, Juan Francisco Martínez Sarmiento, sin embargo le sirvió para comprender la necesidad de resetearse y plantearse muchas de las cuestiones propias de su privilegiada posición social como exitoso emprendedor y empresario. (Aprovecho la ocasión para rendir un pequeño homenaje a Almudena Grandes y aconsejaros la lectura de esta novela). -"El Capitalismo no da más de sí y por mucho que algunos se empeñen ya nada será como antes” asiente el Gran Capitán.
Creo que es mejor no continuar simplemente por no descubrir la trama de la novela, para no hacer spoiler, como se dice hoy.
La pregunta que le hacen al niño y la respuesta que da, es lo que me sirve como pistoletazo de salida para este artículo, como ya lo fueron en los dos anteriores.
¿Qué voy a votar? ¿A quién voy a votar?
Hay partidos, PP y VOX, que han traspasado todas las líneas de la moral, de la decencia, que nos hacen comulgar -y son muchos los que lo hacen- con piedras de molino. Dos partidos que fundamentan su programa electoral en la destrucción de todo lo conseguido con bulos y mentiras que, desafortunadamente, para la gran mayoría social de este país, cala, simplemente porque esgrimen argumentos que, como punta de lanza, van inequívocamente al centro de la diana de nuestra fibra más sensible.
Estamos viendo cómo estos partidos están pactando de forma descarada, desvergonzada y masiva, el PP por fin se ha quitado la careta (no llegaba ni a ser máscara) y muestra sus desvergüenzas. Deberíamos hacérnoslo ver, reflexionar sobre todo lo que este partido (ambos son lo mismo) ha conseguido en la historia de nuestra democracia. Un partido que se ha limitado a poner zancadillas a cualquier medida que ha supuesto un avance social. Un partido que pregonando que tenemos un gobierno ilegítimo, ha esgrimido los alucinantes argumentos en los que se basa: ETA, Independentismo, Venezuela, y otras cuestiones que poco importan al ciudadano de a pie, eludiendo el debate de lo que realmente importa. Sin embargo, lo votan y yo, por mucho que me exprima la sesera no lo entiendo. Pienso en nosotros, nuestros hijos, nietos y vecinos y pienso cómo se puede votar a un partido que hace peligrar nuestro ya deteriorado estado de bienestar. De verdad que no entiendo a ese tipo de votantes, a no ser qué como el Gran Capitán, pertenezca a esa élite social que ve peligrar su poder e influencia. ¿Pero qué pasa con el trabajador? De verdad que no entiendo cómo se deja atrapar en las redes de semejantes partidos que se han limitado a trabajar en contra de todo lo que ha supuesto un mínimo avance social y laboral, a torpedear las instituciones mediante sus bulos y mentiras.
Entiendo y comprendo que de la misma manera que hay obreros de derecha, también se puede ser de izquierda y tener dinero, siempre y cuando lo hayan conseguido de manera honrada. Sin embargo, se ha instalado en el inconsciente colectivo que si bien lo primero es lícito y por tanto normal, lo segundo es antinatural, es una aberración y esto es sencillamente una falacia, un error, y son muchos a los que le patina, y no lo admiten simplemente por no hacer un análisis reflexivo de la cuestión.
Estos dos partidos, de ultraderecha, se han preocupado y muy mucho, de criminalizar la pobreza. La doctrina ultra liberal, ideario de cabecera de estos, mantienen que el que es pobre es porque quiere, porque es un vago o simplemente un inepto. Esto se ha normalizado de tal manera, que va a ser muy difícil desarraigar.
La connivencia entre estos partidos y muchos medios de comunicación gozan de tal impunidad y tienen tan poca vergüenza que han arrastrado el debate político por los suelos y, sin ni tan siquiera inmutarse, han esparcido su mierda sobre una sociedad cansada y hastiada con el único fin de desinformarla, y a fe, que lo están consiguiendo.
Tampoco comprendo, sin embargo, cómo no reivindicamos con ahínco ese sentimiento de clase de la que siempre hemos hecho gala, y que ha servido de ariete para conseguir los avances sociales y laborales de que gozamos hoy día.
El día 23 de Julio nos jugamos mucho, podemos votar en conciencia y porque la sociedad siga avanzando, porque la lucha por las mejoras sociales no se detenga; o bien, podemos votar por los partidos de ultraderecha que han preferido:
QUE NO SE SUBAN LOS SALARIOS.
HAN VOTADO EN CONTRA DE LA SUBIDA DEL SALARIO MÍNIMO INTERPROFESIONAL
VOTAR EN CONTRA DEL INGRESO MÍNIMO VITAL
VOTAR NO A LA SUBIDA DE LAS PENSIONES.
NO AL IMPUESTO A LOS BANCOS Y GRANDES FORTUNAS.
NO A LA REFORMA LABORAL.
NO A LA REFORMA QUE AUMENTA LOS CONTRATOS INDEFINIDOS.
EN CONTRA DEL ABORTO.
NO A LA LEY DE EUTANSIA.
NO A LA EXCEPCIÓN IBÉRICA QUE BAJA LOS PRECIOS DE LA LUZ Y EL GAS.
QUE VOTÓ EN CONTRA DE TODAS LAS AYUDAS QUE SALVARON LA VIDA DE MILLONES DE PERSONAS DURANTE LA PANDEMIA.
VOTAR EN CONTRA DE UNA LEY DE INFANCIA PARA PROTEGER A LOS MÁS NECESITADOS, A LOS MÁS DÉBILES, A LOS NIÑOS.
QUE VOTARON EN CONTRA DE UNA LEY DE CONVIVENCIA UNIVERSITARIA A FAVOR DE LOS ESTUDIANTES.
QUE NO HAN VOTADO JAMÁS A FAVOR DE NINGUNA INVERSIÓN EN CIENCIA.
QUE NIEGAN EL CAMBIO CLIMÁTICO. SON NEGACIONISTAS POR ANTONOMASIA.
QUE HAN VOTADO SIEMPRE EN CONTRA DE CUALQUIER INICIATIVA A FAVOR DEL MEDIO AMBIENTE.
QUE HAN VOTADO SIEMPRE EN CONTRA DE MEDIDAS EN CONTRA DE LOS GRANDES OLIGOPOLIOS, COMO POR EJEMPLO EL ELÉCTRICO.
QUE NIEGAN LA VIOLENCIA DE GÉNERO. UNA LEY APROBADA HACE YA VEINTE AÑOS Y QUE AÚN CUESTIONA LA ULTRADERECHA. ALGO QUE SUPONE NO SÓLO UN RETROCESO SOCIAL SINO MUY PELIGROSO PARA LA CONVIVENCIA.
QUE VOTARON EN CONTRA DE LA LEY QUE PROTEGE A LOS ANIMALES.
QUE ESTÁN MANIFIESTAMENTE EN CONTRA DEL COLECTIVO LGTBI.
QUE NO HAN VOTADO A FAVOR DE QUE LAS TRABAJADORAS DEL HOGAR SI QUIEREN, PUEDAN ACCEDER A UN PARO.
QUE HA VOTADO EN CONTRA DE DE VENDER A PÉRDIDAS.
QUE ESTÁN DESMANTELANDO LOS SERVICIOS PÚBLICOS.
QUE ESTÁN PRIVATIZANDO LA SANIDAD Y EDUCACIÓN PÚBLICA.
QUE MANTIENN SECUESTRADO AL CONSEJO GENERAL DEL PODER JUDICIAL.
QUE HAN DIFUNDEN BULOS Y MENTIRAS CONSTANTEMENTE.
UN PARTIDO, EL PP, QUE HA PREFERIDO ECHAR A SU PRESIDENTE ANTES QUE ATAJAR LA CORRUPCIÓN ENDÉMICA DE LA QUE ES REHÉN.
PARTIDOS QUE ESTÁN EN CONTRA DE LA DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS EN CUALQUIERA DE SUS ACEPCIONES
ETC.
¿Queréis más argumentos para no votar a los partidos de ultraderecha? Pues los hay, y desde aquí os animo a investigar. Vosotros mismos.
No obstante no quisiera terminar sin antes hacer mención a lo sucedido en Extremadura: La candidata del PP para presidir esta comunidad, María Guardiola, se ha plantado ante VOX. "No puedo dejar entrar en mi gobierno a quienes niegan la violencia machista, a quienes usan el trazo gordo, a quienes están deshumanizando a los inmigrantes y a quienes tiran a una papelera la bandera LGTBI. Los de VOX son racistas, sexistas, homófobos y machistas".
¿Es esto un giro hacia la normalización democrática del PP o simplemente una operación de maquillaje dictada por Génova, ya que Feijó ni da la cara ni se le espera? No lo sé, pero el tiempo lo dirá. Me temo que esto es un espejismo, no olvidemos que todos los candidatos de VOX en Extremadura, eran miembros del PP hasta no hace mucho.
Suerte, votad con cabeza y en conciencia, dejad de lado cualquier resentimiento, que seguro tendréis porque no todo lo que se ha hecho ha estado bien. Nos jugamos regresar a esa España en blanco y negro.
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